Social media manager y community manager ¿Son lo mismo?
Y la respuesta a la pregunta del título es «no precisamente». Sin embargo, con tantos tecnicismos, extranjerismos o profesiones expresadas en inglés, es muy común pensar en que estas dos profesiones se dedican a lo mismo. Esto también pasa, por ejemplo, cuando creemos que las redes sociales y el social media son sinónimos, cosa que no es cierto. El Social media es el uso de tecnologías para hacer interactivo el diálogo entre personas, mientras que una red social es una plataforma social formada por personas que comparten intereses similares. Respecto a ambas figuras de manager, cada una corresponde a un profesional que podemos encontrar en una empresa o agencia digital, pero para entender por qué un social media manager es distinto de un community manager debemos describir las funciones de cada uno.
Para empezar, un Social Media Manager (SMM) pertenece al ámbito del marketing online. Esta persona es la encargada de crear, planificar, introducir y liderar la estrategia de la empresa en los diversos medios sociales. Planifica la presencia en las redes sociales y la imagen que se proyectará de la marca o empresa en estas. El enfoque de un social media manager es por tanto, más estratégico, se requiere estar al día de absolutamente todas las redes sociales disponibles, conocer muy bien la comunidad de su cliente, tener una visión de las necesidades y gustos de la audiencia, ¡entre muchas otras cosas! El Community Manager, a diferencia del SMM, es el profesional que se encarga de la gestión de las diversas redes sociales. Por tanto, interactúa y trata de manera directa con los usuarios, seguidores o clientes de la marca. Una de sus funciones principales es promocionar la marca ante la audiencia y comunicarse con esta. Una tarea importante también es la de dar el feedback de la audiencia a la marca. Un Community Manager también crea contenido, pero lo hace con el objetivo de promover la interacción, de fomentar las relaciones con los clientes o posibles clientes.
Podemos decir, entonces, que un SMM trabaja codo a codo con un CM, pero que tiene otras responsabilidades. Entre las tantas tareas se destacan las siguientes: Hacer estudios de mercado, el objetivo de esto es conocer el público existente en las diversas redes sociales, su interés en el producto o la marca, así como las preferencias, tendencias y el comportamiento de los usuarios. Planificar y preparar una estrategia de social media: La creación de un plan estratégico debe hacerse a raíz de la información que haya proporcionado el estudio de mercado. En el plan se suele incluir contenido con un enfoque profesional, la necesidad de un presupuesto, y los objetivos. Luego deberá definir las campañas y las tácticas: El SMM decide cuáles son las redes sociales más adecuadas para la marca y el tipo de promociones que mejor le resultarán. Planear el proceso de crecimiento, es decir, idear las mejores acciones para que crezcan las comunidades. Estas las deberá llevar a cabo el Community Manager en las diversas redes sociales elegidas. El social media manager también deberá analizar la evolución de los competidores de la marca y los resultados de los feedbacks que realice el Community Manager. A partir de éstos, podrá analizar la eficacia de las tácticas y decidir los cambios pertinentes para optimizar resultados. Por último, deberá crear un plan de contingencia ya que en el caso de producirse una crisis de reputación online deberá colaborar activamente en su resolución.
En resumen, el Social Media Manager y el Community manager son dos profesionales complementarios. El primero debe guiar y pautar las acciones, y el segundo responder el resultado de estas. Como habrás notado, detrás de un simple posteo puede haber todo un equipo dedicado a ello. Las redes sociales de una empresa son, hoy en día, una herramienta fundamental, y para muchas resulta un nuevo concepto de comunicación. Es necesario, para sacarle el mayor partido, saber utilizarlas y conocer todo aquello que se puede conseguir con ellas en la era digital. Por eso, las ventajas de contratar una agencia de marketing digital son varias, entre ellas es que tendrás la garantía de la experiencia; también dispondrás de las herramientas profesionales y de todos los recursos de una agencia. En Experience Baires contamos con todos estos servicios y más. No dudes en consultarnos y en visitar nuestra página para tener más información ¡te esperamos!.
Marcela Gangemi
